Los presupuestos generales del Estado para el 2012, los primeros de la era Rajoy, destinaron a inversiones en Catalunya 1.414,51 millones de euros. La cifra no era precisamente de escándalo. Representaba un 11,1% del total de inversiones que el gobierno español considera territorializables, pero quedaba muy lejos del peso del PIB catalán en el conjunto estatal: en plena crisis, entre un 17 y un 18%. El caso es que el 2012 fue el año que el actual Ejecutivo del PP más inversión ha presupuestado para Catalunya. Los 1.149,58 millones de euros que el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha presentado al proyecto de presupuestos generales del Estado para el 2017 son 364,93 millones menos que hace cinco años.

En porcentaje: el gobierno Rajoy invertirá en Catalunya en el 2017 un 28,73% menos que en el 2012. Una vez más, las cifras de inversión del Estado en Catalunya, se desploman, según se puede comprobar en el Informe Económico y Financiero que acompaña las cuentas para el 2017. También en comparación con el presupuesto del 2016 es menos dinero: 32 millones de euros, un 2,69%.

¿Por qué, en cambio, el peso de Catalunya crece un 2,8% en relación con el conjunto de toda la inversión destinada a las autonomías, lo que supone el porcentaje más elevado desde el 2012, un 13,4%? La razón es simple: porque el volumen (estatal) de la inversión territorializada ha bajado: de 11.128,18 millones de euros el 2016 a 8.597,43 en el 2017, un 22,75% menos, como se puede comprobar al siguiente cuadro.

Inversión territorializada del Estado en Catalunya 2012-2017
(Millones de euros y saldo interanual en %)
AÑO Total Catalunya y saldo con el año anterior Total autonomías y saldo con el año anterior Catalunya % sobre el total español
2017 1.149,58
(-2,69 %)
8.597,43
(-22,75%)
13,4
2016 1.181,25
 (+10,26%)
11.128,18
(-1,37%)
10,6
2015 1.071,30
(+12,9%)
11.282,02
(+14,47%)
9,5
2014 948,89
(-25,12%)
9.855,29
(-7,78%)
9,6
2013 1.267,05
(-10,43%)
10.686,33
(-15,91%)
11,9
2012 1.414,51
 
12.707,40
 
11,1

FUENTE: Elaboración propia con datos del Informe económico y financiero de los PGE (2012-2017), Ministerio de Hacienda

Hay muchas maneras de presentar los números. Si miramos las cifras de inversión territorializada del 2016, el resultado fue ligeramente más favorable a Catalunya que este año. En este caso, fue el total de la inversión presupuestada en el Principado la que creció porcentualmente en comparación con el presupuesto anterior: un 10,26%. Por el contrario, el porcentaje catalán sobre el total de la inversión territorializada sólo aumentó un 1,1%. La razón vuelve a ser muy simple: el total de inversión territorializada bajó un 1,37%.

En cifras absolutas, fue en los presupuestos generales del Estado del 2015 donde se produjo el incremento mayor por comparación con el presupuesto anterior: un 12,9%. Ahora bien, una vez más, la cifra que el actual gobierno español y el PP pueden exhibir como una prueba de su compromiso inversor con Catalunya escondía una "verdad oculta": el hecho de que al presupuesto del 2014, la inversión había caído ni más ni menos que un 25,12%. A la práctica, pues, el incremento porcentual del 2015 a duras penas permitía recuperar la mitad de la bajada del 2014. Como se suele decir, los pendrives (de los presupuestos) lo aguantan todo.

El descenso continuado en la inversión es este año políticamente muy significativo por dos motivos: el primero, que este martes hace una semana que el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, prometió ante 500 representantes de la sociedad civil catalana y el empresariado una inversión de 4.200 millones de euros en Catalunya hasta el 2020; es decir, a reflejar en los cuatro presupuestos contados desde el 2017. El segundo motivo es que esta lluvia o tormenta inversora, que, siempre según Rajoy, superaría los 6.000 millones en el 2025, se presentaba en clave de alternativa al programa independentista. A la jornada sobre las infraestructuras, "Conectados al futuro", no acudieron los grandes patrones catalanes de las compañías del Ibex.