El president, Carles Puigdemont, ha reiterado esta mañana en declaraciones a Catalunya Ràdio que su gobierno "por coherencia y dignidad democrática" no puede seguir gobernando si por segunda vez ve cómo el Parlament le tumba los presupuestos.

Puigdemont respondía así a las declaraciones hechas los últimos días desde la CUP en el sentido que la legislatura puede continuar adelante aunque no se aprueben las cuentas del Govern.

El president ha asegurado que las democracias avanzadas en las cuales se quiere reflejar Catalunya no aceptarían esta situación y tampoco los ciudadanos. "Aquel gobierno se habría acabado con todas las consecuencias", ha advertido.

Con todo, el jefe del ejecutivo catalán ha asegurado que tiene constancia que la voluntad de la CUP es sacar adelante el proyecto que se está tramitando en el Parlament. "Hemos de ser capaces de trascender la lógica de los partidos", ha emplazado, lo cual no le ha impedido responder a las acusaciones de Anna Gabriel en el sentido que JxSí quiere destruir a la CUP: "Nosotros no queremos destruir a nadie. Nos han querido destruir a nosotros". En este punto, ha denunciado el uso de fondos reservados para investigar a dirigentes de CDC, mientras que desde el punto de vista político ha recordado que ha sido la CUP quien "ha querido enviar a la papelera de la historia" a su partido.

Reunión con Rajoy en enero

Puigdemont ha asegurado que ya se está preparando la reunión con el presidente español, Mariano Rajoy, y que es "perfectamente posible" que se celebre antes de que acabe el mes de enero. Por lo que respecta a su no asistencia a la Conferencia de Presidentes Autonómicos, ha insistido que Catalunya ya no puede participar en el "régimen común" y quiere negociar con bilateralidad. "Hemos salido por voluntad de los catalanes", ha remachado.

Eso no impedirá, sin embargo, que el Govern siga reclamando todos aquellos capítulos pendientes de liquidación de la financiación, según ha asegurado el president, que ha recordado que Catalunya comparte una comisión de técnicos con el Ejecutivo balear, que sí asistirá a la reunión.

El president ha insistido en que el Govern seguirá defendiendo ante el ejecutivo español el referéndum acordado, que "muchos constitucionalistas" dicen que es "perfectamente constitucional" celebrarlo y que, por lo tanto, "es un problema político". En este sentido, ha desafiado al Estado a proponer el referéndum en el conjunto del territorio español, si es lo que quiere, siempre y cuando acepte el resultado en Catalunya, y ha asegurado que "cuando llegue el momento de la convocatoria" también buscará observadores internacionales.

Candidato del PDeCAT

El político gerundense se ha referido también a la situación de su partido y al debate sobre el candidato. Al ser preguntado sobre el debate que se hizo a puerta cerrada en la reunión de lunes del comité nacional del PDeCAT donde el presidente del partido, Artur Mas, explicó, tal como publicó El Nacional, que no tiene interés en ser candidato, Puigdemont dejó claro que eso no quiere decir que se descarte como cabeza de lista. "Nadie más aparte de Carles Puigdemont se tiene que descartar para nada", ha asegurado que es la tesis de Mas.