La primera teniente de alcalde del Ayuntamiento de Girona, la socialista Sílvia Paneque, ha asegurado que no pondrán "palos en las ruedas" cuando el consistorio colabore en la organización del referéndum. "Tenemos muy claro que la primera obediencia la debemos a los ciudadanos y desde una minoría dentro del equipo de gobierno no podemos imponer nuestra visión", ha manifestado Paneque.

La alcaldesa, Marta Madrenas (CiU), ya ha dejado claro que se pondrán a la disposición del Parlament y del presidente para ayudar "en lo que haga falta" y cree que eso no tiene que generar tensiones en el sí del gobierno de coalición.

Paneque cree que para superar la situación hay que votar pero afirma que el referéndum planteado el 1 de octubre "no tiene bastantes garantías democráticas". Una postura que también defienden los alcaldes de l'Escala, Víctor Puga, y Blanes, Miquel Lupiáñez. "Para resolver la situación de callejón sin salida actual hay que recorrer a las urnas", ha dicho Puga. "Como alcalde no promoveré acciones para evitar que la gente vote", apunta a Lupiáñez.

Según los planes del Govern, los ayuntamientos tendrán un papel activo en la organización del referéndum del próximo 1 de octubre. Por eso, desde la dirección del PSC han enviado una carta a sus alcaldes y concejales a fin de que no colaboren con el referéndum y que antes de tomar cualquier decisión pidan un informe escrito del secretario municipal.

Algunos concejales y alcaldes socialistas de la demarcación de Girona, sin embargo, se han desmarcado -en parte- de la directriz del partido. En la capital, por ejemplo, el PSC gobierna en coalición con CiU desde la salida de Carles Puigdemont en enero de 2016. En aquel momento, ya acordaron que en temas nacionales tendrían libertad de voto y actuación.

Desmarcarse de Nicaragua

Paneque recuerda que el plenario de Girona es mayoritariamente independentista y que el grupo socialista ya ha votado en diferentes ocasiones de manera diferenciada a las directrices de Nicaragua. "Ya conocen cuál es el planteamiento del PSC gerundense", afirma.

De todos modos, no cree que eso tenga que suponer ningún problema con la dirección. "Iceta siempre nos ha trasladado que la cuestión nacional no tiene que ser un aspecto que añada tensión a los grupos municipales, el partido respeta la diversidad de actuaciones de cada grupo teniendo en cuenta la realidad social de cada municipio", añade.

Para la primera teniente de alcalde de Girona, la situación actual "de callejón sin salida" se tiene que resolver con una votación pero difiere del planteamiento del Govern: cree que la salida es la reforma de la Constitución orientada a un sistema federal.

Protección de los trabajadores

Por su parte, la alcaldesa de Girona, Marta Madrenas, ha afirmado que desde el principio se han puesto al lado del Parlament y el presidente y ahora continuarán en la misma línea. "Tenemos ganas de escuchar la voz de los catalanes, creemos en la democracia y nos pondremos a su disposición para ayudar en lo qué haga falta", ha declarado.

La alcaldesa considera que este posicionamiento no tiene que generar tensiones en el sí del gobierno de coalición. "El PSC ha aceptado y entendido nuestro posicionamiento y no tenemos que encontrar ningún obstáculo para ir haciendo vía", ha añadido.

Tanto para el grupo de CiU como para el del PSC, la prioridad será la "protección" de los trabajadores que quieran implicarse en la organización de la votación. "Participen de la manera que participen, nunca se los pondrá en riesgo y encontrarán toda la protección de las administraciones", ha asegurado la alcaldesa.