Unidos Podemos presentó la moción de censura contra Mariano Rajoy por los escándalos recientes en el Ejecutivo, y también, por la corrupción en el Partido Popular. "Ustedes han hecho de la corrupción una forma de Gobierno" denunciaba la portavoz Irene Montero entre gritos desde el atril. Pero a medida que avanzaba el debate, Montero ha convertido la sesión en una impugnación a la totalidad de la figura de Rajoy. La podemita le ha echado las culpas por haber encendido la mecha del conflicto soberanista en Catalunya, y le ha instado a aceptar la autodeterminación.

"Decidir no rompe nada. Ustedes han roto España y la han vendido a trozos en fondos inversores", ha denunciado Montero, en alusión a la deuda española. La diputada ha recordado que fue cuando gobernaba el PSOE que Rajoy promovió la campaña de recogida de firmas contra el Estatut, motivo por el cual le ha acusado de "rebentar" el pacto de convivencia y el territorial, a través de hacer "del anticatalanismo su bandera". "Un Estatuto aprobado en las Cortes lo llevaron a su Tribunal preferido, el Constitucional, porque son puros demócratas", se ha jactado.

El partido lila ha puesto por encima su proyecto para España, que es la plurinacionalidad y la "fraternidad", donde el derecho a decidir sería reconocido, en contraposición a la "falta" de proyecto" del PP y sus "oídos sordos" a las peticiones del 80% de catalanes.