El presidente de CDC, Artur Mas, y la consellera de Presidència, Neus Munté, se perfilan como el tándem que presidirá la nueva Convergència. Mas ha anunciado esta mañana que propondrá que la nueva formación esté liderada por un tándem presidencial -integrado por presidencia y vicepresidencia- que además tendrán que estar cruzados por género. Es decir, que tendrá que haber un hombre y una mujer. El político convergente ha anunciado que si el nuevo partido que se va a crear acepta esta fórmula, él optará a ocupar el cargo.

Aunque no ha querido confirmar el nombre de la persona con quien propondrá formar el tándem, fuentes convergentes dan por descontado que será Munté. Se trata de una presidencia muy potente, donde los dos miembros intercambiarán las funciones, y que además de la representación más institucional tendrá una función de coordinación interna del equipo ejecutivo de un partido en que todo apunta que no habrá secretario general y del que desaparecerán muchos de los nombres que hasta ahora ocupaban la primera línea.

Mas ha comparecido para explicar su propuesta de cara al congreso que CDC celebrará este fin de semana donde Convergència se disolverá -aunque mantendrá un núcleo latente- y se creará un nuevo partido para ocupar su espacio. Lo ha hecho después de que los rumores que han circulado en los últimos días sobre la nueva dirección han provocado tensiones dentro del partido.

Neus Munté

Aunque el líder convergente ha evitado concretar con quien formará tándem para la presidencia, al ser preguntado por si sería Neus Munté, ha admitido que la consellera "es una persona de máxima confianza para mucha gente", además de representar a las diferentes sensibilidades del partido.

"Mi apuesta se hará en función de cómo queden las cosas este fin de semana", ha insistido.

Lo que sí ha dejado claro es que su propuesta para la nueva dirección sólo contempla el ticket de la presidencia, y no para el conjunto de la ejecutiva. La nueva dirección se escogerá en un segundo congreso que se convocará el 23 de julio.

Dirección de 12 personas

Esta propuesta del presidente del partido quita hierro a la batalla por la dirección, a la que han anunciado que quieren optar el exconseller Germà Gordó y el presidente del grupo parlamentario de JxSí, Jordi Turull. Mas ha dejado claro que no tiene porque haber secretario general en el nuevo partido, y que la dirección estará formada por un grupo de 12 personas, que optarán en equipo al congreso.

Para el líder convergente, el congreso tiene que servir para feminizar y rejuvenecer la dirección del nuevo partido, con dirigentes "los más próximos" a la gente, es decir, del mundo municipal. "Gente que tengan una perspectiva de 15, 20 años por delante, y gente muy próxima a las necesidades de las personas", ha asegurado.

Ni Homs, ni Rull, ni Corominas, ni Sánchez...

"Es una manera de demostrar que la renovación va muy seriamente. Estoy seguro que se configurará alguna candidatura que incorporará a gente nueva. No quiere decir gente sin experiencia", ha asegurado. En estos sentido, ha señalado que dirigentes como Francesc Homs, Francesc Sánchez, Lluís Corominas y Josep Rull han anunciado que no figurarán en la nueva cúpula, lo que demuestra esta voluntad de hacer surgir nuevos liderazgos.

En cuanto a su papel, Mas ha dedicado las últimas semanas a hablar con muchos dirigentes del partido y la conclusión que ha extraído es que se le pide que haga de "puente entre experiencia de muchos años y lo que empieza a nacer a partir de ahora".