El portavoz de ERC en el Congreso, Joan Tardà, ha asegurado que Catalunya se encuentra en una situación en que se dan las mismas circunstancias que en 1931 y que la sociedad está "ante un 14 de abril", fecha en la cual se proclamó la II República Española en 1931.

En una conferencia hoy en la sede nacional de la formación, Tardà ha alertado de que las conquistas del Estado social se encuentran en peligro, pero que Catalunya dispone de las herramientas para revertir la situación, que son, a su juicio, la mayoría independentista en el Parlamento y un Gobierno "dispuesto a abrir los colegios electorales", en relación a un hipotético referéndum sobre la independencia de Catalunya.

"Hay un 80% de ciudadanos comprometidos con el referéndum: podemos hablar de ruptura democrática", ha manifestado el diputado, pero ha rechazado el término 'revolución social' porque, para él, el proceso soberanista representa una revolución democrática.

Movimientos sociales

La conferencia que ha pronunciado Tardà ha tenido como título 'República catalana, apoderamiento ciudadano y democracia'. En ella ha destacado el valor de los movimientos sociales a la hora de conquistar derechos y oponerse a la dictadura y Tardà ha llamado a incluir estas plataformas en un hipotético proceso constituyente en Catalunya, que permita ganar más derechos subjetivos por la vía constitucional.

Tardà ha apuntado que una hipotética república catalana tendría que fundamentarse en un sistema que permita "ir más allá" de lo que ha definido como capitalismo salvaje, y ha añadido que la democracia no tiene que estar supeditada a las exigencias de los poderes económicos.

En este sentido, ha apostado por avanzar hacia una "democracia cooperativa" y ha alertado del posible nacimiento de movimientos sociales reaccionarios que no estén a favor de la república catalana, y es por este motivo que ha reclamado una acumulación de fuerzas antes y después de una eventual proclamación de la república.

Para conseguirlo, Tardà ha vaticinado que será necesario que una hipotética constitución catalana sea ratificada por más de un 80% de la población y que los inicios de una eventual república "no serán fáciles porque tendrán el Estado en contra".