El exvicepresidente norteamericano durante el gobierno de Obama, Joe Biden, acusa al presidente ruso, Vladímir Putin, de estar llevando a cabo un "asalto descarado a los fundamentos de la democracia occidental en todo el mundo", a la cual considera la "mayor amenaza" para Rusia. En el contexto de esta lucha, Biden cita, entre otros, el referéndum independentista catalán como un ejemplo de proceso electoral en el que Rusia ha intentado interferir.

En un artículo publicado en la revista Foreign Affairs, el exvicepresidente asegura que el Kremlin ha intentado influir "en un amplio abanico de países europeos". Incluye en esta lista el referéndum en los Países Bajos (sobre la integración de Ucrania en Europa), en Italia (sobre reformas de la gobernanza) y "en España (sobre la secesión de Catalunya)", sostiene Biden, que no entra en más detalles sobre cuál fue exactamente la actuación de Rusia.

Biden, en una referencia más general a las interferencias rusas, habla de la existencia de intermediarios que "propagan desinformación usando cuentas falsas en redes sociales" y elaboran mensajes a medida para grupos demográficos específicos, dependiendo de los objetivos del Kremlin. Sus objetivos van "desde desanimar la participación electoral hasta fomentar la asistencia a mítines de los candidatos favoritos de Rusia", explica Biden.

Según el político, estos mensajes son difundidos por "hackers patrióticos" y troles rusos contratados por entidades próximas a Putin pero sin vínculos directos con el Kremlin y el gobierno ruso.

Pasiones nacionalistas

Biden asegura que Rusia quiere "salvaguardar su sistema cleptocrático, llevando la lucha más allá de las fronteras rusas". "Atacando en Occidente, el Kremlin desvía la atención de la corrupción y el malestar económico en casa, activando las pasiones nacionalistas para reprimir la disidencia interna y mantiene a las democracias occidentales a la defensiva y preocupadas con las divisiones internas", ha añadido Biden, subrayando que con eso Moscú "consolida su poder en casa y ejerce una influencia ilimitada" en su entorno.

En este sentido, el exvicepresidente norteamericano, sostiene que el Gobierno ruso está llevando a cabo "ataques coordinados en muchos terrenos -militares, políticos, económicos, informativos- utilizando una variedad de medios abiertos y encubiertos".