El Estado y el Govern estudiarán la necesidad de realizar campañas de promoción turística conjuntas para Barcelona y la Costa Daurada tras los atentados, según ha avanzado el conseller de Empresa y Conocimiento de la Generalitat, Santi Vila, tras reunirse con el ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Álvaro Nadal.
En declaraciones a los medios en la sede de la Delegación del Gobierno en Catalunya, Vila ha afirmado que en estos momentos, las dos administraciones están evaluando conjuntamente la reacción de la actividad turística tras los ataques, y ha constatado que prácticamente no ha habido anulaciones de reservas.
"El comportamiento ha sido muy positivo, prácticamente no ha habido ninguna incidencia desde el punto de vista de anulaciones y de solicitud de repatriaciones", ha asegurado Vila, que ha manifestado que Estado y Govern abordarán si es oportuno hacer campañas conjuntas que permitan afianzar los activos turísticos tanto de Barcelona ciudad como de la Costa Daurada.
Ha indicado que serán los equipos técnicos de la Agencia Catalana de Turismo (ACT), de Turespaña y del Ayuntamiento de Barcelona quienes deberán diseñar qué orientación deben tener las campañas de promoción, pensando en la temporada de verano de 2018.
Ha destacado que las administraciones deben estar muy atentas a los congresos y otras actividades turísticas que "aún admiten cierto margen de maniobra" y podrían revisar si se celebran en una ciudad u otra de cara a 2018 o 2019. "Aquí es donde las administraciones tenemos que incidir más en estas campañas que puedan disuadir posibles miedos y comprometer prereservas que ya están hechas", ha argumentado.
Vila ha valorado muy positivamente la "complicidad" con el Ministerio desde las horas posteriores a los atentados, ya que ha asegurado que el contacto se ha mantenido de forma continua desde entonces.
Recuperación de reservas
El ministro de Turismo ha dicho que las reservas de avión para Barcelona registraron un "descenso tremendo" en el fin de semana inmediatamente posterior a los atentados de Barcelona y Cambrils, pero ya crecen por encima del 7 %, porque la ciudad es una "marca turística poderosísima".
Ha señalado que todavía es pronto para saber la repercusión que tendrán los ataques en el turismo de la ciudad, pero que en las reservas de hoteles, aviones y paquetes de operadores turísticos tenemos "prácticamente total normalidad", lo que le hace ser "moderadamente optimistas".
Ha asegurado que se sigue considerando a España y Barcelona como un destino "seguro" y que, comparada la situación con otras ciudades en las que ha habido atentados de estas características, la situación de Barcelona "es mucho mejor". Por otro lado, el ministro ha asegurado que las reservas internacionales de avión siguen creciendo aunque de manera más ralentizada que antes del atentado.