El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Alfonso Dastis, ha subrayado en su discurso ante la Asamblea General de la ONU que "cualquier desafío a las reglas del juego democrático constituye un ataque grave contra la convivencia en paz y libertad", aludiendo así a la cuestión catalana.

Dastis no ha mencionado expresamente a Catalunya, pero sí ha advertido de que "contraponer una presunta legitimidad a la legalidad constitucional desemboca inexorablemente en la vulneración de derechos fundamentales de millones de ciudadanos y es incompatible con la democracia".

Así, ha proclamado que "España es una sociedad libre y abierta", con derechos y libertades "amparados por el Estado social y democrático de Derecho que emana de la Constitución", de manera que "el Gobierno de España ni puede ni va a renunciar a la defensa del Estado de Derecho y de los valores que lo inspiran: la libertad, la igualdad, la justicia y el pluralismo político".

Prioridades de España

"Los poderes públicos tienen el deber de garantizar los derechos y libertades de todos los españoles", ha remachado. Dastis también ha dejado claro que "con la misma convicción y determinación con que defendemos la España constitucional y democrática" España sigue comprometida con los valores, propósitos y principios de la Carta de Naciones Unidas.

El ministro, que encabeza la delegación española al inicio de este 72 periodo de sesiones de la Asamblea, ha hecho esta defensa de la legalidad al inicio de su discurso, tras agradecer a todos los Gobiernos las muestras de solidaridad tras los atentados de Barcelona y Cambrils.

El discurso, en el que ha hecho un repaso de las prioridades españolas en la arena internacional, ha comenzado así con Cataluña y ha finalizado con un llamamiento a Reino Unido para que, con el trasfondo del Brexit, se avenga a negociar con España un acuerdo sobre Gibraltar "que ponga fin a un anacronismo de todo punto extravagante" en unas relaciones que son "excelentes".

La España generosa

Dastis ha defendido que "España ha hecho un planteamiento generoso" -una oferta de cosoberanía- que "conjuga la irrenunciable reivindicación de la soberanía española sobre la colonia con un estatuto que beneficie a los habitantes del Peñón de manera que puedan seguir disfrutando de las ventajas de la pertenencia a la Unión". Y ha recordado a Londres que la propia ONU ha exhortado a ambos países a negociar.

En su repaso de la escena internacional, ha dicho también que "el imperio de la Ley en la esfera internacional no puede permitir quiebras al principio de soberanía e integridad territorial de los Estados", de modo que "la anexión de Crimea es una violación de la soberanía e integridad territorial de Ucrania, en clara contravención del Derecho Internacional".

En Irak, donde el Kurdistán también planea un inminente referéndum independentista, ha recordado que España apoya "la reconstrucción del país y la reconciliación entre sus ciudadanos" y rechaza "aventuras políticas que detraigan esfuerzos de la prioridad de consolidar un Irak libre, democrático y unido".