La alcaldesa de Barcelona e impulsora de Catalunya en Comú, Ada Colau, ha advertido este martes sobre el referéndum que el Govern prevé celebrar el 1 de octubre: "Si por las prisas el Govern de JxSí hace una convocatoria que es unilateral con respecto a más de la mitad del país, nos hace un flaco favor como país".

"Tenemos que trabajar por un referéndum que interpele a la mayoría, que no se deje la mayoría por el camino, porque va en contra de los intereses de Catalunya", ha sostenido Colau en una entrevista en TV3, después de insistir en que el Ayuntamiento facilitará la participación sin poner en riesgo la institución y los funcionarios.

Colau ha pedido que el 1-O no sea fruto de la impaciencia, que ha dicho comprender ante un exasperante bloqueo del PP, ni de la precipitación de JxSí, y ha opinado que si no se puede celebrar un referéndum con garantías, no es por culpa del Govern, sino de un Gobierno central del PP en el cual ve prácticas "antidemocráticas".

Ha defendido trabajar por un referéndum "bien hecho, pero no por formalismos, sino para que interpele la mayoría" con un acuerdo transversal que respete la pluralidad, hecho que requiere garantías, un debate neutral desde las instituciones y dar voz a todas las opiniones.

"Es una ficción pensar que dependen de mí o de los comuns para hacer un referéndum que interpele a la mayoría", ha aseverado Colau, quien ha reiterado que el Govern todavía no lo ha convocado formalmente y que el consistorio no ha recibido ningún requerimiento.

Referéndum posible

"Tal vez el referéndum no será posible el 1 de octubre, pero lo será. Estoy convencida de que podremos si seguimos luchando desde el consenso", ha defendido Colau, que considera falso asegurar que no hay nada que hacer ante un Gobierno del PP autoritario y que judicializa, y ha pedido batallar al margen del proceso soberanista por otros objetivos, como el Corredor Mediterráneo.

Ha augurado que el 1-O "será una cita más, vaya como vaya, en la larga trayectoria" de un proceso a favor de un referéndum para resolver democráticamente el encaje entre Catalunya y el resto de España, y ha recordado que las escuelas de la capital catalana dependen en su mayoría del Consorcio de Educación de Barcelona, de la cual la Generalitat controla un 60%.

Preguntada por si votará al 1-O, ha remarcado que su predisposición a participar en movilizaciones por el derecho a decidir es conocida —participó en el 9-N con un 'sí-sí'— y ha dicho que su grado de implicación dependerá de cómo se convoque y sus detalles: "Si te ponen contra la pared para saber si eres unionista o independentista, del 'sí' o del 'no', estamos faltando a la realidad, a la pluralidad".