El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha afirmado hoy que el Gobierno español "lógicamente" utilizará "todos los resortes que la Constitución establece" y, en concreto, el artículo 155 ante la situación en Catalunya, ya que "no hay alternativa" aunque han intentado "hacer llamamientos al diálogo".

En declaraciones a los medios de comunicación en Cuenca, donde el ministro ha participado en las jornadas "El populismo en Europa: nuevas perspectivas" organizadas por la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), Catalá ha lamentado que el presidente catalán, Carles Puigdemont, ha contestado al requerimiento que le envió al Ejecutivo "una vez más con evasivas, indirectas, haciendo referencias a la represión, a falta de diálogo por parte del Gobierno".

No obstante, para Catalá, esta respuesta ha puesto de manifiesto "la falta de voluntad para encontrar soluciones a una situación tremendamente compleja". Por eso, ha sostenido que el Gobierno "estará donde le corresponde, del lado del cumplimiento de la ley y del cumplimiento de la Constitución".

"Es la obligación que tenemos, no podemos actuar de otra manera", ha señalado Catalá, que ha apuntado al hecho de que el sábado se celebrará un Consejo de Ministros extraordinario para "garantizar que en Catalunya, como en todas las partes del territorio nacional, se cumplen las obligaciones por parte de los poderes públicos, se respeta la ley y las sentencias de los tribunales".

Así, ha resumido que "lógicamente se utilizarán todos los resortes que la Constitución establece" y, en este caso, la aplicación del artículo 155, porque "no hay alternativa". "Hemos intentado hacer llamamientos al diálogo, hemos pedido aclaraciones donde había ambigüedad, donde no se sabía si había declaración de independencia o no, si había con respecto a la legalidad y a la constitución o no", ha expuesto Catalá.

También ha señalado que se ha intentado abrir un espacio para que Puigdemont "aclarara, concretara, pudiera evitar un escenario posiblemente indeseado para todos", pero ha insistido en que, después de la respuesta de Puigdemont, "el primer compromiso de un gobierno democrático es cumplir la ley".