Una cincuentena de eurodiputados de seis grupos políticos en Bruselas y representantes de 19 estados miembros han reclamado al presidente español, Mariano Rajoy, que "detenga inmediatamente" las "acciones represivas" contra Catalunya y abra "un diálogo político". En una carta, los eurodiputados aseguran que el referéndum de autodeterminación es "una reivindicación política legítima" de los catalanes.

Según los eurodiputados, la situación catalana ha llegado a un "punto crítico" y la estrategia del gobierno español "no es sólo una violación de los derechos fundamentales básicos sino la estrategia errónea para resolver un tema político". "Le pedimos que rectifique inmediatamente", dicen los eurodiputados a Mariano Rajoy, que advierten que el Estado está haciendo un "abuso y mal uso del poder".

A la carta, los eurodiputados, de España, Irlanda, Austria, Bélgica, Italia, el Reino Unido, Letonia, Alemania, Dinamarca, Estonia, Eslovenia, Lituania, Suecia, Rumanía, Italia, Portugal, Finlandia, Francia y Hungría, advierten que "la vulneración de la libertad de expresión y de reunión no es aceptable en los estándares democráticos de la Unión Europea" y consideran su "deber", como representantes europeos, "condenar las acciones desproporcionadas de las autoridades españolas".

"Instamos al gobierno español a detener sus acciones represivas inmediatamente, parar de violar los derechos civiles y jugar un rol constructivo e implicarse, enseguida, en un diálogo político con las autoridades catalanas", reclaman los eurodiputados, entre los cuales hay representantes de todos los grupos políticos europeos excepto el Partido Popular Europeo ni tampoco del grupo de extrema derecha ENL.

"Los políticos, y no los jueces o los policías, tendrían que gestionar los desacuerdos políticos en cualquier estado democrático europeo", recuerdan los parlamentarios. "Los debates en el Parlament de Catalunya para convocar un referéndum de independencia, que tiene un amplio apoyo de la población, no pueden comportar un juicio contra su presidenta ni la Mesa", critican.