Los carteles a favor de los presos políticos catalanes que tienen los senadores de ERC en sus despachos en la cámara alta han aparecido hoy con muestras de burlas y rabia, según han rebelado.

 

Algunas de las figuras de los carteles han aparecido pintadas o con cuernos, y algunos de los papeles, rotos. El acceso a los despachos de los senadores está restringido, y no abierto al público externo al Senado.