El presidente de la Cámara de Comercio de España y de Freixenet, Josep Lluis Bonet, ha condicionado los resultados de las elecciones del 21-D a la "recuperación" de la marca Barcelona, que considera que "está muerta" después de perder en la votación de la sede del EMA.

"Lo que pasó es gravísimo; Barcelona nunca había perdido un concurso internacional hasta hace dos meses, ahora la marca Barcelona está muerta", ha resaltado. Según el empresario, todo depende del resultado de las elecciones. "Los que vivimos allí tenemos que hablar muy claro: si seguimos por el mal camino saldremos en desbandada", ha soltado.

Por todo eso, ha pedido "una demostración de fraternidad del resto de los españoles con los catalanes", sobre todo después de las elecciones del 21 de diciembre. Así se ha expresado ante 1.300 directivos y ejecutivos que durante este martes han participado en la XVI edición del Congreso de CEDE, que se desarrolla en el Auditorio de la Diputación de Alicante.

"Muchos catalanes han llegado a la conclusión que no les quieren, y resulta que sí", ha manifestado, por lo que ha instado al resto de españoles a hacer gestos en esta dirección "a medio y corto plazo", pues contribuirán a la "concordia y la convivencia".

Además, preguntado sobre la situación española del sector empresarial, ha opinado que se enfrenta a un "riesgo interno gravísimo" a causa del conflicto secesionista en Catalunya.

"No se ha valorado exactamente hasta donde puede afectar este problema político, que ahora ya deja ver las primeras consecuencias, como la marcha en Amsterdam de l'Agencia Europea de Medicamentos (EMA), hecho que ha calificado como "fatal".