El Ibex se ha venido abajo, aunque sin derrumbarse, después de que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea haya sentenciado de forma inesperada a favor de la retroactividad de las devoluciones por cláusulas de suelo abusivas. Estas cláusulas impedían a los clientes beneficiarse de los descensos del Euribor a partir de un determinado montante. Según el Banco de España, la banca afronta la devolución de más de 4.000 millones de euros.

Este varapalo se ha sumado al temor que está provocando la situación de la banca italiana aun cuando el nuevo Gobierno se haya prestado a ayudarla. Monte dei Peschi ha señalado en una nota que podría quedarse sin liquidez en los próximos meses. Este SOS se ha entendido o bien como una demanda a la Administración para que actúe con urgencia, o tal vez como el reconocimiento de que su solvencia es muy incierta.

Los inversores han tomado nota y se han refugiado, entre otros activos, en deuda española, cuyo rendimiento ha caído sensiblemente. La prima de riesgo se ha situado en 110 puntos básicos.

En el Ibex, entre los bancos ha sido el Sabadell uno de los menos castigados al reiterar que sus cláusulas no han sido declaradas nulas por falta de transparencia. Gamesa, Ferrovial y Técnicas Reunidas se han situado entre otros valores que se han mantenido en zona positiva. 

En la Eurozona, la confianza del consumidor ha caído al 5,1% frente al 6% esperado, sumándose al desasosiego creado por el atentado en Berlín. Los mercados están incrementando su atención a los riesgos políticos y geoestratégicos, priorizándolos sobre la evolución del petróleo, que hoy subía ligeramente.

En Wall Street, la venta de casas de segunda mano, ascendieron a 5,61 millones frente a 5,5 millones esperados. Pero eso no influyó en que el Dow Jones retrocediera a media sesión un 0,10% al sentir las resistencias que empieza a encontrar según se acerca a la cuota de los 20.000 puntos.