Cuatro casos de esta misma semana:

1/ Las azafatas del trofeo Conde de Godó de tenis han denunciado que las obligaron a trabajar con un uniforme que no se correspondía con las condicionas meteorológicas existentes. Hacía frío, llovía y la empresa que las contrató (Schweppes) les negó la posibilidad de poder abrigarse. ¿Por qué? Una de las chicas, Raquel Muñoz, denunció a El Matí de Catalunya Radio que trabajaron con fiebre, que se quejaron y que la respuesta fueron gritos y el argumento de que con la chaqueta puesta no se veía la marca. Cuando ha estallado el caso, la organización ha pedido disculpas. Lo peor del caso, sin embargo, no es si el uniforme era de verano o de invierno. No, el gran tema es el uso de chicas como reclamo publicitario, como carne que se paga a peso. Bien, al menos no hicieron como en el torneo de tenis de Madrid, que el año 2009 contrataron directamente modelos como recogepelotas.

2/ El Ayuntamiento de Jerez ha pedido que en el gran premio de España de motociclismo que se disputa en la ciudad este fin de semana no haya azafatas porque entienden que "se trata de un uso sexista del cuerpo femenino". Una de las chicas, que trabaja en la carrera, en el Masters de tenis de Madrid y en la Vuelta a España ha dicho que "esta petición quita el trabajo a un grupo de mujeres y eso sí que es sexismo. Me gustan mucho las motos y este trabajo me permite escuchar las conversaciones entre mecánicos y pilotos. Vendemos la imagen de una marca, de la misma manera que lo hacemos para catálogos o anuncios. No me siento un objeto y algunas marcas nos visten más provocativas, pero somos modelos y sabemos como llevar esta ropa. Trabajar como azafata me permite pagarme la carrera de medicina".

Sí, seguramente esta chica lo ve todo de color de rosa y no es consciente del uso que hacen de ella. En todo caso le recomiendo que si tiene un momento pregunte a otras compañeras que hacen de azafatas en según qué ferias y qué congresos y que tienen que soportar todo tipo de insinuaciones de individuos que, o bien aprovechan su posición, o bien van totalmente pasados de vueltas. Cosas que aún son peor que ser un objecto.

Finalmente la petición quedará en nada porque la organización considera que las chicas son trabajadoras del circuito como muchos otros y, en todo caso, estudian que de cara a otras ediciones se incorporen chicos.

¿Y sabe lo peor? Que la solución a un anacronismo como el de tener mujeres luciendo carne sin otro objetivo que el de lucir carne sea poner chicos luciendo carne, en vez de hacer desaparecer una práctica sin ningún sentido colo la de lucir carne.

3/ La cantante Emma Marrone estaba ensayando en un plató del Canal 5 italiano y pasó esto:

En el programa, llamado Amici di Maria de Filipi, se les ocurrió que sería muy gracioso hacerle uno bromita. Y tuvieron la brillante idea de hacer que uno de los bailarines la sobara, a ver cómo reaccionaba y grabar el resultado. Lo peor del caso no es que un programa encuentre gracioso hacer que un señor meta mano en una chica que ha ido allí a trabajar. No, lo más terrible es que el público reía, incluidas varias mujeres. Y que el programa ha colgado el vídeo para hacerlo viral, sin decir que era una broma. O sea, doble inmoralidad: la bromita y usarla para hacerse publicidad.

4/ Hoy mismo hemos sabido que el fiscal solicita 22 años y 10 meses de prisión para cada uno de los cinco acusados de la violación en grupo a una chica durante los pasados sanfermines. La violación es un acto brutal y hacerla en grupo todavía lo supera, pero es que los individuos grabaron las imágenes y las colgaron en su grupo de Whatsapp. No existe adjetivo para definirlo. ¿Excusa de las defensas? Fue un acto consentido.

Pero todavía hay un par de cosas más terribles: uno de los presuntos es Guardia Civil y otro militar (pero, ¿qué pruebas hacen para ingresar?) y en los programas matinales de TV se dedicaron a entrevistar familiares y amigos diciendo que eran unos buenos chicos que cayeron en las garras de una cualquiera que ahora les busca la ruina. Terrible.

Y ahora usted quizás se preguntará que hacen las dos últimas noticias con las dos primeras. Bien, es que creo que una cosa tiene relación con la otra. Cuando se usa a las mujeres como reclamo visual para vender un producto o un acontecimiento, es muy fácil pensar que las mujeres están en el mundo para hacer de objeto. De consumo y de uso. Y si sirven para aguantar un paraguas a un tenista o a un piloto de motos, también sirven para que alguien piense que será muy divertido hacer que las magreen o que 5 presuntos hagan lo que hicieron en Pamplona.

Y no, la solución no es poner a chicos, gais o lesbianas para gustar a los diversos colectivos/consumidores sino dejar de alquilar carne para vender el paraíso. Y quizás si dejamos de hacerlo, alguna cosa empezará a cambiar.