El Gobierno del Senegal ha anunciado este domingo la prohibición de "todas las actividades deportivas y culturales" mientras dure la campaña electoral, después de la muerte de ocho personas este sábado en una avalancha humana en el estadio Demba Diop de Dakar durante la final de la Copa de la Liga senegalesa.

La tragedia, que se saldaron con 88 heridos, tuvo lugar a causa del derrumbe de parte de una gradería a causa de la presión generada por los seguidores que trataban de salir después de que empezara un enfrentamiento entre varios seguidores.

"El Gobierno apela a la calma y la serenidad", ha dicho el portavoz del ejecutivo senegalés, Seydou Gueye, que ha condenado los "incidentes" al estadio y ha presentado su pésame a los familiares de las víctimas. Asimismo, ha recalcado que las autoridades llevarán a cabo una investigación para determinar las causas, y ha añadido que "la ley será aplicada con todo su rigor", según ha informado la agencia estatal senegalesa de noticias, APS.

Por su parte, el presidente del país, Macky Sall, ha indicado que "el deporte no es un lugar de expresión de la violencia", y ha pedido a la población que "acabe con la violencia en todas sus formas". El trágico incidente ha tenido lugar en medio de la campaña electoral que está en marcha en el país, con de cara a las elecciones legislativas del 30 de julio, en las cuales serán escogidos los 150 miembros del Parlamento.