La policía de Bruselas ha abierto fuego contra un vehículo en el distrito de Molenbeek después de una persecución a gran velocidad y el conductor ha declarado que llevaba explosivos.

El sospechoso, que todavía no ha sido identificado, conducía un Citroën Picasso matriculado en Alemania, y ha recibido un impacto en la rueda que provocó su paro.

La policía ha acordonado la zona esperando la llegada de los cuerpos del ejército encargados de la detección de explosivos, ha afirmado Ine van Wymersch, portavoz de la fiscalía de Bruselas.

Testimonios en la zona han afirmado también haber sentido un par de explosiones controladas, y se espera todavía la identificación del conductor y la posible vinculación con un hipotético ataque terrorista.

El distrito de Molenbeek, suburbio de la capital, se hizo famoso hace unos meses por haber acogido una célula del Estado Islámico vinculado con los ataques terroristas en Paris noviembre del 2015, que causó 130 muertes, así como con los ataques a Bruselas cuatro meses después, que mataron a 32 personas.