A pesar de haber perdido la mayoría necesaria para llevar a cabo un Brexit duro y sin oposición en el Parlamento Británico, May parece ser que ya se ha repuesto del 'porrazo' electoral y visitará hoy mismo a la Reina Isabel II para exponerle los siguientes pasos. La primera ministra en funciones se desplazará a Buckingham Palace para pedirle a su majestad formar gobierno, pero con el apoyo de otra agrupación política.

Según la BBC, la 'premier' británica contaría con el soporte del Partido Democrático Unionista de Ulster (DUP), que ha obtenido un total de 10 escaños, de los 18 que le corresponden a Irlanda del Norte en los Comunes.

De esta manera, con esta decena de diputados y los 318 escaños que corresponden a los conservadores, May conseguiría la mayoría que necesita para seguir con su plan de gobierno y el Brexit.

Por su parte, el partido de extrema derecha y uno de los impulsores más populares del Brexit, el UKIP, no ha obtenido los votos suficientes para tener representación en el parlamento británico y May pierde a un aliado importante en Westminster. Farage, ya retirado, ha sido duro con la 'premier' afirmando que ha puesto en peligro el Brexit. Por su parte, el líder del UKIP, Paul Nuttall, ha dimitido por los malos resultados.

Corbyn también quiere gobernar

El Partido Laborista, comandado por Jeremy Corbyn, ha conseguido frenar la subida conservadora e incluso lo ha hecho estrellarse al conseguir hasta 21 escaños más respecto de las anteriores elecciones. Con el resultado final, el líder laborista ha pedido a la primera ministra en funciones la dimisión: "ha perdido votos, apoyo y confianza. Yo diría que es suficiente para marcharse".

De esta manera, los laboristas recuerdan que también están en posición de gobernar: "nadie tiene una mayoría parlamentaría en este momento, el partido que ha perdido esta elección es el Partido Conservador, los argumentos presentados por los conservadores en estos comicios" han "perdido"

Los 'tories', que estuvieron casi 20 puntos por encima de los laboristas en el momento de convocar elecciones, han ido cayendo progresivamente en las encuestas hasta producirse unas elecciones que han igualado el mapa electoral británico: un parlamento fragmentado que traquetea entre la línea conservadora que ha seguido en el último año o la alternativa progresista que hoy han celebrado al 41% de los habitantes del Reino Unido. Cono a tras fondo, las negociaciones para el Brexit tendrían que empezar el 19 de junio.