Tal día como hoy del año 1607, hace 410 años, moría en Vic (Osona) el obispo Francesc Robuster i Sala. Hasta poco antes la diócesis de Osona era la más extensa y la más poblada de Catalunya. Cubría el territorio entre Camprodon -en el norte- y Mollerussa -en el sur-, y entre Sant Hilari Sacalm -en el este- y Solsona -en el oeste. Y concentraba la tercera parte de la población del país. Los obispos de Vic rivalizaban con los de Barcelona, e incluso con los arzobispos-cardenales de Tarragona. Cuando Robuster se hizo cargo de la mitra de Osona, a pesar de la amputación territorial que le causó la creación de la diócesis de Solsona (1593), todavía era uno de los principales resortes de poder del país.

En aquellos años Catalunya estaba sumida en una guerra civil intermitente. Los últimos latigazos de la revolución campesina de los Remences de finales de la centuria de 1400. Por una parte el partido Nyerro -la nobleza militar y rentista arruinada por la derrota; y por la otra el partido Cadell -las villas y las ciudades, con los gremios artesanos y campesinos. Tanto unos como los otros disponían de pequeños ejércitos de bandoleros que, a menudo, efectuaban campañas de castigo contra los intereses rivales. Vic, a pesar de ser ciudad, estaba controlada por los nyerros. Los canónigos de Vic, el equivalente a los ministros del gobierno de la diócesis, eran declaradamente nyerros. Y en cambio Robuster era declaradamente cadell.

Robuster, durante su mandato, armó a grupos de bandoleros, comandados por el capitán cadell Gabriel Torrent de la Goula. Pero no consiguió derrotar a los nyerros. Perot Rocaguinarda, capitán de los grupos nyerros y protegido por el arzobispo de Tarragona -el nyerro Terés-, en una ocasión entró en Vic con 500 bandoleros con el propósito de asesinarlo. Pasado el tiempo, Torrent fue arrestado y colgado por el virrey castellano. En cambio Rocaguinarda fue invitado por otro virrey castellano a acogerse a un indulto, y murió de viejo como capitán de los Tercios castellanos. En Reus, ciudad donde se crio el obispo cadell, una calle de la parte histórica lleva el nombre de Raval Robuster, en su memoria.