El lanzamiento de los nuevos coches Ibiza i Arona de Seat ya ha supuesto una inversión de 900 millones de euros. Así lo ha confirmado el presidente de Seat, Luca De Meo, que ha querido dejar claro que la inversión (la más alta que la firma automovilística ha destinado a nuevos modelos) es una nueva demostración de su firme compromiso con el desarrollo económico de Catalunya. "Somos más que una fábrica", ha destacado De Meo ante la atenta mirada del presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, que ha realizado su primera visita a las instalaciones de Seat en Martorell. La metáfora futbolística ha provocado las sonrisas de los asistentes pocas horas antes del trascendental partido entre el Barça y la Juventus.

Coincidiendo con el inicio de la producción en serie del nuevo Ibiza, el presidente de Seat ha recordado que Martorell es pionera en tecnologías avanzadas (gafas inteligentes o robots autónomos) y representa el 4% del PIB catalán y el 10% de las exportaciones de Catalunya. "Esta inversión demuestra nuestro compromiso con el desarrollo económico del país y ratifica nuestro liderazgo como el primer inversor industrial en R+D. Seat desarrolla un papel clave desde el punto de vista inversor, tecnológico, industrial y laboral, así como para la generación de riqueza y bienestar", ha añadido.

Por su parte, el presidente de la Generalitat ha agradecido la evolución económica positiva de la firma automobilística así como el compromiso con el sector industrial catalán y la captación de inversión por parte del grupo Volkswagen. A cambio, "siempre que haga falta, el Govern estará a vuestro lado." Momento idóneo para revindicar con "orgullo" la relación entre Catalunya y Seat como un espejo de país: vocación industrial, ambición para no resignarse y apertura al mundo. "Hay una Catalunya-Seat, una Catalunya que es consecuencia directa de la Seat, una Catalunya que nos habla de fábricas, que nos habla de diferentes municipios, de modelos de automóviles, de muchas familias... Y de esta Catalunya-Seat nos sentimos muy orgullosos como país", ha asegurado Puigdemont.

Los nuevos modelos

Tanto el Ibiza como el Arona (todoterreno urbano de pequeñas dimensiones) se desarrollarán íntegramente en la línea 1 de la fábrica de Martorell que pasará de dos a tres turnos de trabajo para afrontar la demanda de los nuevos modelos. Esto no implicará a priori nuevas contrataciones puesto que se incorporarán trabajadores de la línea 2 dedicada al León. Se espera que el nuevo Ibiza llegue a los concesionarios a partir de junio mientras que para el Arona se tendrá que esperar hasta después del verano. 

Justo antes de finalizar la visita, Puigdemont y De Meo han podido compartir todavía un rato más dando una vuelta con el nuevo Ibiza por una fábrica que es más que una fábrica. Una buena forma de calentar motores para esta noche de Champions.