Mireia Belmonte, que este martes ganó la medalla de plata en los 1.500 metros, ha realizado el tercer mejor tiempo en las semifinales de los 200 metros mariposa y, por lo tanto, ha conseguido una plaza para las finales de esta categoría en el Mundial de Budapest.

La badalonesa ha nadado en 2:06.71 en su prueba favorita. Únicamente han estado por delante la alemana Franziska Hentke, autora de la mejor marca mundial del año (2:06.18), y que hoy ha nadado en 2:06.29, y la china Zhou Yilin, que ganado la primera serie con 2:06.63.

Tras la carrera, la española ha asegurado que la final se presenta "muy bonita" debido a que el nivel entre las favoritas es muy parecido. "La carrera ha sido extraña. No sé cómo describir mis sensaciones, porque ha sido un poco extraño todo", ha asegurado después de salir de la piscina. Belmonte también ha admitido que "estaba un poco cansada" después de haber nadado también las series matinales de esta prueba.

Una final igualada

Para la final, que se nadará mañana, la española ha explicado que tendrá que "saber los puntos fuertes y débiles de cada una de las rivales", pero ha advertido que "la final es una final y cada uno nada como puede".

"Todas estamos en el mismo nivel, nos separan pocas décimas", ha enfatizado al afirmar que "es lo bonito de la competitividad que hay", que ninguna de las nadadoras se destaca tanto como para que haya una diferencia de varios segundos. Por sensaciones, la badalonesa es favorita en la final de mañana, en la que podría conseguir una medalla de oro que se le resiste en los Mundiales.