Final de etapa. La trayectoria de Luis Enrique en el banquillo del Barça se ha acabado con la consecución de la Copa del Rey, pero a pesar del final feliz el técnico asturiano tiene clara su decisión de abandonar el club. "Necesito dejarlo".

"No estoy triste en absoluto. Necesito dejarlo y creo que a los jugadores también les irá bien. Necesitan nuevos estímulos", ha explicado a la rueda de prensa posterior al último partido como entrenador del Barça. Sobre su etapa en el Barça, el entrenador ha hecho pública su admiración a "la profesionalidad de los jugadores y estoy muy contento de haber podido ayudarlos".

"He dado el 100% a mis jugadores y he recibido lo mismo. No puedo reprocharles nada y creo que ellos a mí tampoco", ha analizado, aunque ha admitido que le hubiera gustado "dar más alegrías a nuestra afición". No obstante, "poder cerrar la temporada con un título siempre es positivo": "He disfrutado mucho. Y de muchas cosas. Si puedes hacer feliz a los culés, te sientes muy orgulloso", ha sentenciado.

Ningún consejo a su sucesor

Respecto al nuevo entrenador, Luis Enrique no ha querido darle ningún consejo: "seguro que el nuevo entrenador tiene más experiencia que yo. Que lo disfrute". Y en relación a su despido con los jugadores, más elogios; "Este título es de todos, significa que hemos hecho las cosas bien. Somos una gran familia". Y sobre Messi, "un extraterrestre", ha dicho que ha sido un placer poder entrenarlo".

El técnico tampoco ha querido olvidarse de su mujer y su hija, a quien les ha dedicado el título "porque son quienes más me sufren cuando llego a casa enfadado". Y sobre su futuro, ninguna pista: "No sé qué haré, estoy abierto a cualquier cosa, incluso a cambiar de deporte".