El 38º duelo entre dos de las leyendas todavía en activo del tenis mundial se ha decantado, nuevamente esta temporada, de la banda de Roger Federer. El tenista suizo ha superado Rafa Nadal en la cuarta ocasión del 2017 para agrandar su leyenda. La victoria del número dos mundial sobre el uno es un aliciente más para un final de año en plena disputa del liderato de la ATP. El Masters 1000 de Shanghái se pone el sello Federer por segunda vez.

La clase y el estilo de Federer ha pasado por encima de un Nadal errática y mucho a merced de los golpes del suizo. A los 36 años, Federer sigue en lo alto del tenis mundial, pero a estas alturas es segundo del ranking mundial luchándole la primera posición al manacorense. Después de la última victoria en Shanghái en el 2014, el suizo ha vuelto a levantar el título chino. Con respecto a Nadal, sigue sin poder ganar al Qizhong Forest Sports City Arena y pierde por segunda vez una final en uno de los pocos Masters 1000 que le quedan para poner en su vitrina.

La edad no es problema

No hay edad para dejar de ganar. O eso es lo que se piensa cuando se habla de Federer. En Shanghái ha vuelto a demostrar que todavía le queda mucha cuerda. Su ritmo es el habitual, sin excesivos esfuerzos explosivos, pero técnicamente muy fino.

Moviendo al rival de lado a lado, jugando a la red y también de fondo, además de demostrar que su servicio no para de dejar a todo el mundo mudo. Pocos errores, pocas improvisaciones y control por encima de todo. Federer ha tenido un camino plácido y haciendo valer su mejor tenis para dejar las 16 victorias consecutivas de Nadal en un dato del pasado.

Después de la final de Australia, de los octavos de Indian Wells y de la final de Miami, ahora se le suma la final de Shanghái en una temporada que de los cuatro duelos mutuos entre los dos tenistas, el suizo siempre ha salido vencedor. El final de temporada se presenta emocionante, sin el número uno mundial decidido y con la Copa Masters de Londres de fondo divisando el panorama que le llega.

Más de una década de enfrentamientos, desde que eran jóvenes y ahora que ya son mayores, pero la rivalidad no tiene edad. Nadal todavía tiene el balance favorable con un 23-15, pero sobre pista rápida Federer no tiembla. 11 victorias del suizo por 9 del manacorense sobre una de las superficies no preferidas para Nadal.