El Espanyol no ha podido ganar en su visita a Nápoles (2-0), en el último partido de pretemporada de los blanquiazules y al mismo tiempo el más exigente, a causa de los goles de Mertens y Albiol.

A pesar de ser el partido de presentación del Nápoles ante su afición, el estadio de San Paolo no ha presentado una gran entrada, con muchos espacios vacíos en diferentes zonas del campo. En cambio, las alineaciones sí que han sido de gala, con Diop otra vez ocupando la posición de central. También ha vuelto a repetir Adrià López como portero titular, después de que Pau y Diego López aún no estén a disposición de Quique Sánchez Flores.

El Nápoles ha empezado fuerte, con ganas de gustarse delante de su público. Con un juego muy directo hasta el punto que ya en el minuto cinco el árbitro ha anulado un gol de Lorenzo Insigne por fuera de juego. A medida que han avanzado los minutos, el duelo se ha ido calmando, con posesiones más largas para los locales, y con un Espanyol aferrándose a la velocidad y los contragolpes de sus delanteros. Aun así, la gran ocasión del conjunto blanquiazul ha venido a través de un remate de cabeza de Gerard Moreno, después de un gran servicio de córner, que se ha marchado rozando el palo.

Una genialidad de Mertens

Ante este escenario, el Nápoles ha puesto una marcha más, y poco a poco ha ido haciéndose amo y señor del partido. Pero el primer gol no ha llegado hasta pasada la media hora de juego cuando Mertens, con un magnífico e imparable lanzamiento de falta desde la frontal del área, ha establecido el 1-0. El Espanyol, por su parte, ha dejado jugar al conjunto italiano, sin presionar su salida de balón.

En la segunda mitad Quique ha movido el banquillo dando entrada a Melendo y Granero para intentar controlar el medio del campo. Pero el protagonista ha sido Albiol, autor del segundo gol después de rematar, sólo, un servicio de esquina al fondo de la red. En los minutos finales el Nápoles ha podido ampliar distancias en el marcador con dos disparos, uno de ellos en fuera de juego.

Con este resultado, el Espanyol cierra una pretemporada de más a menos, con un balance de 3 victorias, 2 empates y 1 derrota. Ahora hará falta pulir diferentes aspectos, y esperar más refuerzos, para llegar en buen estado de forma al debut en LaLiga ante el Sevilla.

Una visita especial

A buen seguro que, para la parroquia perica, volver a ver al Espanyol en San Paolo ha sido especial. Fue el último estadio donde jugó el añorado Dani Jarque que, días después de aquel partido, murió por culpa de un ataque de corazón. El capitán blanquiazul dejó una huella muy importante en el club, por el peso que tenía en el equipo y la afición.

Tanto fue el luto de su pérdida que, actualmente, la ciudad deportiva del club lleva su nombre, y en los partidos que se disputan en el RCDE Stadium, siempre a lo largo del minuto 21 -el dorsal que llevaba Jarque- el público aplaude alargando su leyenda ocho años después.