Los accionistas rebeldes de Prisa se han salido con la suya. Juan Luis Cebrián, presidente ejecutivo del grupo editor, será sustituido por Javier Monzón, expresidente de Indra y ahora consejero de Banco Santander España. El consejo de administración de Prisa lo decidirá este viernes 13 de octubre. Prisa es la editora de El País y gestiona también la cadena de radio SER.

Cebrián, director fundador del diario, es presidente ejecutivo desde el 2012. Que su cabeza olía a pólvora se sabía desde antes del verano. Este lunes, sin embargo, la agencia de noticias Bloomberg adelantó que podía caer este viernes y la noticia la ha confirmado El Confidencial.

El relevo de Cebrián era la condición del bloque de accionistas mayoritario y también de los acreedores del Prisa para acudir a la necesaria ampliación de capital que se tratará en el consejo del viernes. Encabeza a los rebeldes de Telefónica, que ha reunido en su bando a Banco Santander, CaixaBank, HSBC y el fondo buitre Amber.

Revuelta

Los accionistas del grupo ya se sublevaron en el consejo de administración del junio pasado. Cebrián está en su punto de mira porque no ha conseguido enderezar el precio de las acciones de Prisa, que han perdido el 99,6% de su valor desde que el grupo salió a bolsa, el año 2000. Es el peor desempeño entre los 53 grupos de medios europeos valorados en más de 100 millones de euros por la agencia de información y datos económicos Bloomberg.

Los planes de Cebrián pasaban por vender una parte de la editorial de libros de texto Santillana, la joya de la corona del grupo. Los accionistas nunca lo han visto muy claro.

En junio, Cebrián zafó la acometida sacrificando al consejero delegado José Luis Sainz. Este viernes, sin embargo, será diferente y se prescindirá del periodista, de 74 años de edad.

El consejo de administración también aprobará una ampliación de capital de más de 400 millones de euros, que sumada a la venta de la filial portuguesa Medía Capital por otros 440 millones, se considera suficiente para encarar la deuda del grupo, que asciende a 1.900 millones de euros. El valor del grupo en bolsa es de 280,4 millones.

El pasado 29 de septiembre, en junta extraordinaria, los accionistas redujeron el capital social de Prisa en 155 millones de euros y aumentaron las reservas legales en 7,05 millones de euros para evitar entrar en concurso de acreedores (quiebra técnica).

El sustituto

El entorno de Cebrián presenta al nuevo presidente ejecutivo, Javier Monzón, como una idea del mismo Cebrián. La biografía de Monzón, sin embargo, deja margen a otras interpretaciones, porque actualmente es consejero de Santander España, uno de los bancos acreedores de Prisa.

Monzón fue durante más de veinte años el primer ejecutivo de Indra, la tecnológica que fundó y de la que el Estado es ahora el primer accionista. Eldiario.es explica que un año después de dejar Indra (diciembre de 2015), y dos meses después de que se le retirara la presidencia honorífica de la compañía al descubrir que había escondido al consejo de administración la compra de un avión privado con dinero de la empresa, Monzón fue nombrado consejero de la multinacional metalúrgica Ferroglobe, controlada por Juan Miguel Villar Mir.

Los principales accionistas de Prisa son la familia Polanco (vía Rucandio SA, 17,527%), el fondo oportunista Amber (15,885%), Telefónica (13,058%), CHO Networks (del mexicano Roberto Alcántara, 8%), el banco HSBC (9,564%), Caixabank (4,906%) y Santander (4,145%), y miembros de la familia real de Qatar (8,17%).