Incierta gloria, de Joan Sales, es una de las obras emblemáticas de la literatura catalana, y su adaptación cinematográfica por Agustí Villaronga (Mallorca, 1953), que llegará este viernes a los cines, es una de las películas catalanas más esperadas de este año. En los papeles principales están Núria Prims, como Carlana; Oriol Pla, como a Soleràs; Marcel Pla, como Lluís; y Bruna Cusí, que debutaba con esta película, como Trini. Los acompañan algunos autores veteranos, encabezados por el aragonés Fernando Esteso. Incierta gloria es una producción de Massa d'Or, con la participación de TV3. Urresti Producciones, RTVE, Movistar y Aragón TV, con el apoyo de numerosas instituciones catalanas, aragonesas y baleares. La productora Isona Passola confía en que el hecho de que la película llegue a los cines ayudará a promover esta novela, publicada por Club Editor, que ya ha sido traducida a veinte idiomas y que ha recibido magníficas críticas por todo el mundo.
El argumento
Incierta gloria es una novela de Joan Sales, escrita en 1956, en que explica las vivencia de unos jovenes en la guerra civil, de forma muy distante de la propaganda, tanto franquista como republicana. Narra la historia de un joven teniente que va a la guerra, al frente de Aragón, cuando es joven y está cargado de ilusiones, y que ve como su universo se va hundiendo con el paso del tiempo. Y, además, paralelamente se va rompiendo el mundo de sus amigos y compañeros ante la dura realidad de la guerra.
Guerra con pocos tiros
En la novela Incierta gloria hay algunas batallas, pero Villaronga ha preferido no reproducirlas en la película: "La parte bélica no es necesaria en base al enfoque que tiene la película", argumenta. Villaronga afirma que para hacer una película con escenas de guerra había que dedicarle muchos esfuerzos, porque el público está muy acostumbrado a grandes escenas de combates: "una batalla tiene que tener argumento". Pero, para el director, lo principal es que la película no habla de combates, ni de ideologías, sino de los efectos de la guerra sobre la gente que va a luchar. Agustí Villaronga quiere poner énfasis en cómo un conflicto bélico transforma a los jóvenes, "que tenían tantas ganas de vivir" y que nunca volverán a ser como eran. Define la película, pues, como un "canto a la juventud".
Tres películas, tres novelas
Esta es la tercera gran obra de la literatura catalana que Villaronga lleva al cine. Empezó con El mar, de Blai Bonet, y continuó con Pan negro, de Emili Teixidor, que le mereció muchos premios, entre ellos el Goya al mejor director y el Gaudí a la mejor película en lengua catalana. En los tres casos se trata de películas ambientadas en la guerra civil, pero Villaronga no quiere que se lo encasille como un realizador especializado en estos temas. Asegura que aunque las tres cintas estén ubicadas cronológicamente en la guerra civil y en la posguerra, en ninguna de ellas el tema central es la guerra. Y en esta adaptación al cine ha suprimido algunas de las reflexiones filosóficas y teológicas sobre la guerra que aparecían en la novela de Sales. De hecho, él sueña en hacer un cine universal y ha grabado películas en lugares bien lejanos, como Tahití o Cuba... Y está decidido a volver a hacerlo.
Agustí Villaronga en el Hospital de Sant Pau. Foto: Pere Francesch. ACN.
Personajes complejos, ambiente enrarecido
Villaronga cree que el gran potencial de la guerra es que afecta a la personalidad de los personajes, y opina que la gran virtud literaria de Joan Sales es haber retratado a unos personajes complejos que trabajan en conjunto, mediante las tensiones mutuas. El director reconoce que tiene predilección por las personalidades difíciles, que le atraen más las personas con conflictos que las personas planas. "No sabría ni cómo empezar para hacer una comedia romántica sobre dos personas que se quieren casar". Villaronga ha trabajado mucho con los personajes femeninos, que acaban ocupando un lugar central en la película. Sin embargo, sobre todo, el director mallorquín cree que la gran responsabilidad del director es crear el ambiente que facilite que los personajes sea verosímiles: "Crear una atmósfera es en buena parte un trabajo del director, y a mí me gusta hacerlo". En este caso, Villaronga decidió dar el máximo protagonismo al duro paisaje de Aragón, que lo ha ayudado a que esta película tenga una atmósfera sustancialmente diferente a las de sus cintas anteriores.
Adaptación muy personal
Los actores insisten en qué en este rodaje ha sido clave la figura del director. Núria Prims asegura que "Agustí es muy preciso, muy duro", y el veterano Fernando Esteso concretaba: "Es vehemente, es cariñoso, sabe lo que quiere...". Isona Passola lo tiene muy claro y está convencida de que ha hecho la elección correcta de director: "Agustí Villaronga es el bueno. Lo escogí por intuición, pero la acerté de lleno". Afirma que "es más que un director para mí", "somos casi una pareja de hecho. De hecho, pasan el día juntos durante la promoción de la cinta y, por casualidades de la vida, nacieron el mismo día, el mismo año y el mismo mes. La productora asegura que se encuentra nerviosa, porque el primer fin de semana de exhibición es clave para prever la evolución de la obra, pero afirma que confía plenamente en lo que ha hecho el director mallorquíny pronostica un gran éxito para esta cinta.