El Ibex continúa manteniendo su fuerte ritmo de aceleración y está ya en niveles de los 9.300 puntos pese a los momentos de vacilación en que circunstancialmente incurre. El fondo es alcista y sobre ese escenario las economías levantan obstáculos para sumarse a la ola de mejora.

Italia es un ejemplo y el referéndum fue el momento de dar un salto en el cambio de referencias de paradigmas de los mercados. No sólo es la normalización política sino también los movimientos hacia un saneamiento -complicado y largo- de su sector bancario, como ha iniciado Unicredit e intenta Monte dei Paschi.

La Unión Europea ha logrado mejorar su nivel de empleo en el tercer trimestre, con un récord de 232.500 millones de trabajadores, siendo las economías portuguesa y española las que encabezan el ranking. A su vez, la encuesta ZEW sobre el sentimiento inversor en Alemania de cara a los próximos seis meses ha mostrado estabilidad. Buen síntoma. El euro ha subido a 1,0640 dólares.

En la subasta de deuda, el Tesoro ha colocado 3.650 millones de euros en letras a 6 y 9 meses a tipos de interés a niveles del -0,530% y -0,289% respectivamente, muy por debajo de las tasas de noviembre.

En el Ibex, los bancos, como Caixabank, Santander y BBVA avanzaron con firmeza, y Mediaset ha logrado liderar el índice después de que Viviendi -que tiene una participación del ·3%- mostrara su intención de ampliarla hasta el 20%. IAG también se recuperó al relajarse la subida del precio del petróleo.

En Wall Street, el Dow Jones no se pone frenos y sube a media sesión un 0,54%, sin temor a lo que haga mañana la Reserva Federal. Los mercados se han hecho con el protagonismo de la nueva situación y dejando en segunda fila a los bancos centrales.