La percepción global de que era hora de tomar beneficios antes de que la Reserva Federal comunicara su decisión sobre tipos de interés y, sobre todo, de que su presidenta, Janet Yellen, hablase en rueda de prensa hizo retraerse al Ibex  como ya anunció en la apertura.

El punto en qué han estado centrado los mercados en las horas previas ha sido el desentrañar las claves de la futura actitud de la Fed una vez que Donald Trump se aloje en la Casa Blanca y adopte medidas de estímulo para la economía, que pueden no encajar con los esquemas de Janet Yellen y su consejo.

Wall Street abrió sin rumbo mientras el petróleo Texas retrocedía un 1,42%, hasta 52,43 dólares, tras previsiones de una caída de la demanda global en un futuro próximo. La producción industrial americana se contrajo un 0,4% en noviembre  mientras las ventas minoristas avanzaban un 0,1% el mismo mes. La Fed de Atlanta rebajó la previsión de crecimiento de la economía en el cuatro trimestre hasta el 2,4% frente al 2,6% previo.

Lo contrario se produjo con el Banco de España, que situó el crecimiento de la economía española en el 3,2% gracias al dinamismo del empleo. Y advirtió también la autoridad monetaria: "la reanudación del proceso de consolidación presupuestaria resulta prioritaria para reducir las vulnerabilidades de la economía española". Se refería a los impuestos y a las medidas de austeridad adoptadas, que para algunos van a frenar el crecimiento. 

 En este sentido, la Eurozona ha suspendido el programa de alivio de la deuda a Grecia tras decidir Atenas pagas de beneficios a pensionistas.

En el Ibex, Inditex sufrió el castigo habitual que recibe en bolsa tras presentar unos elevados beneficios, en esta caso de dos dígitos. Mañana será un día para conocer su auténtica valoración, al igual que el del conjunto de los mercados ante el nuevo marco de política monetaria.