El euro vuelve a penalizar a las bolsas europeas, mientras el diferencial de la deuda española sigue descendiendo. Al traspasar el nivel de 1,15, el euro ha superado ligeramente la parte superior del rango que se sitúa entre 1,15 y 1,05 que ha servido de referencia durante desde el comienzo de 2015. 

Aún no se puede descartar que vuelva a rebotar en este nivel y retroceder a la parte baja, pero lo que queda más alejado el regreso a la paridad. En este movimiento, mucho tendrá que ver el tono que transmita el BCE en su reunión de mañana y la FED en la de la próxima semana. Además de afectar a la cotización de las empresas exportadoras europeas, esta apreciación del euro ha podido contribuir al sentimiento de los inversores alemanes. Ayer se conoció que el indicador de confianza ZEW de julio se situó en 17,5 frente a 18,6 de junio, con lo que suma tres descensos en los últimos meses. 

En España las noticias fueron positivas, ya que el FMI se ha sumado a las estimaciones que ven el PIB crecer por encima del 3% en 2017. De esta forma el diferencial de la deuda española a 10 años se redujo por debajo de 100pb, que supone estar en los niveles más bajos desde 2010 (con la excepción de unos días en 2015). Hoy esperamos una jornada de transición ya que la reunión del BCE de mañana ha pasado de ser puramente de trámite a ser interesante  por el impacto que pueda tener en la moneda única. Lo lógico es que trate de rebajar la presión.