Unió Democràtica de Catalunya acabará extinguiéndose aplastada por las deudas pero los que todavía están en la barca democristiana (o socialcristiana, como le gustaba decir a Josep Antoni Duran i Lleida) se las saben casi todas y han fabricado una cápsula donde guardar las semillas del histórico partido (fundado en 1931, todavía es el más antiguo del país). Se trata del Institut d'Estudis Humanístics Miquel Coll i Alentorn (INEHCA), que funciona como la fundación del partido, think tank, laboratorio de ideas, llámele B. Eso garantiza a las ideas de Unió una pervivencia más allá del partido. También la preservación de las siempre prestigiosas relaciones internacionales con otras fundaciones democristianas del mundo. Parece que quien se pondrá al frente de la cosa será Salvador Sedó, aquel eurodiputado hijo de Reus, que tuvo que ser sacrificado después de que CDC se opusiera ferozmente a incluirlo en las listas europeas. A Sedó lo consolaron entonces con un escaño en el Senado. Ahora vive y lucha en el INEHCA. Grande.