El Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado en Comisión de Ecología, Urbanismo y Movilidad el proyecto refundido de los túneles de Glòries, con un presupuesto de 149.267.648 euros. El proyecto incluye el proyecto modificado del túnel situado entre las calles Badajoz y Castillejos (96,7 millones de euros) y el proyecto ejecutivo actualizado de los túneles viales, entre la calle Badajoz y la Rambla del Poblenou (52,4 millones de euros). El nuevo proyecto se ha aprobado con los votos a favor del gobierno municipal, del grupo Demócrata, ERC, C's y el concejal no adscrito, Gerard Ardanuy. El gobierno municipal trabaja ahora para sacar a licitación el proyecto el próximo mes de octubre con el objetivo que las obras se puedan reanudar las obras a principios de 2018. Paralelamente, también se ha aprobado el proyecto de urbanización de la plaza de las Glòries para convertirla en un gran parque urbano. La primera fase está dotada con un presupuesto de 19,7 millones de euros.

Con respecto a los túneles, el proyecto modificado del primer tramo incorpora varios cambios técnicos, como un cambio de geometría de las pantallas de hormigón, una mejora en la ejecución del túnel bajo los túneles ferroviarios, nuevas estructuras por el desvío del alcantarillado o una nueva definición de las losas de la cubierta y del apuntalamiento. El proyecto actualizado del segundo tramo prevé una adaptación de lo mismo a la obra realmente ejecutada del primer tramo, así como la puesta al día de costes y criterios de intervención.

En su conjunto, la actuación consiste en la construcción de unos túneles urbanos –dos tubos independientes con circulación unidireccional– con una longitud de casi un kilómetro que recogerán el tráfico de la Gran Vía, con un tráfico medio de 90.000 vehículos diarios. Los túneles siguen el recorrido de Gran Vía y pasarán por debajo de cuatro túneles de metro y de Rodalies.

A partir de la aprobación inicial del nuevo proyecto, el gobierno municipal trabaja para licitar, mediante lotes y de manera conjunta, la construcción de los dos tramos de túneles el próximo mes de octubre. El objetivo es reiniciar las intervenciones a principios del 2018, con una duración prevista de la obra civil de 32 meses. De acuerdo con el calendario establecido, se prevé la puesta en funcionamiento de toda la infraestructura el primer trimestre del año 2021, una vez licitadas y ejecutadas las obras complementarias de instalaciones y acabados.

Por otra parte, actualmente se están finalizando los trámites para la liquidación del primer contrato de obras, después de que el 24 de abril de 2017, el Consejo de Administración de BIMSA notificara la resolución del contrato a la unión temporal de empresas formada por Comsa, SAU, Coloza Constructora Pirenaica, S. A., Benito Arnó e Hijos, SAU; Romero Gamero, SAU, a consecuencia de los retrasos previstos por causas imputables al contratista y en aplicación de lo que preveía el propio contrato de obra.

El futuro parco urbano, también en marcha

En paralelo, la Comisión de Gobierno también aprobó inicialmente el jueves pasado el proyecto de urbanización del ámbito Claro de la plaza de las Glòries. Se trata de la primera etapa del proyecto global Canòpia Urbana, que convertirá la plaza en un gran parque urbano. En concreto, el Claro comprende el espacio que queda entre las calles Independencia y Cartagena. Por el norte, el ámbito se extiende hasta el edificios existentes de la calle de Consell de Cent, y por el sur, hasta el vial provisional de la Gran Vía. En total, una superficie de 45.860 metros cuadrados.

El proyecto contará con una inversión de 19,7 millones de euros y está previsto que las obras empiecen en enero de 2018 y finalicen al cabo de un año. La intervención prevé una gran explanada de césped, un nuevo paseo para peatones y bicicletas en la rambla de los Encantos, juegos infantiles, una zona lúdica y deportiva con una pista polivalente o un área para perros, así como un área para el mantenimiento y la gestión de los espacios verdes.