El metro de Barcelona vive su undécima jornada de huelga de un lunes laborable con el conflicto entre la dirección y los sindicatos enquistado y que hoy coincide por primera vez con la huelga del bicing, cosa que ha complicado la movilidad a primeras horas de la mañana de hoy.

Según fuentes de Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB), en estas primeras horas de huelga no se han registrado problemas importantes de movilidad, y se han llevado a cabo las ya habituales regulaciones de paso de pasajeros a la estación de la Sagrera.

Las mismas fuentes han explicado que se ha producido alguna incidencia en estaciones como la del Clot (L1), donde se han inutilizado algunas máquinas expendedoras de billetes y de validación, aunque la incidencia ya ha sido solucionada.

También se han registrado actos vandálicos en las máquinas de validación de títulos en las estaciones de Joanic (L4) y Fontana (L3), que todavía no han podido ser reparadas y que siguen fuera de servicio. Las negociaciones que mantienen el comité de empresa y la dirección de Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB) por el convenio colectivo están bloqueadas.

Las paradas convocadas por el comité otro lunes laborable más han afectado a la movilidad de los ciudadanos entre las 07.00 y las 09.00 horas de la mañana, y volverán a hacerlo entre las 16.00 y las 18.00 horas, horas puntas en las cuales los servicios mínimos establecen la circulación del 40% de los trenes. Por la noche, de 20.30 a 22.30 horas, sólo funcionarán el 20% de los trenes habituales.

El comité de empresa, presidido por el sindicato CGT, ha rechazado recientemente la propuesta de la Generalitat que el conflicto en el suburbano se resuelva con un arbitraje voluntario, cosa que sí que había aceptado TMB. Además, la plantilla de TMB ha acordado hacer huelga también durante la festividad de la Diada (el 11 de septiembre); Mercè, (el 24 de septiembre) y en aquellos partidos de Champions del FC Barcelona que obligan a alargar el servicio de metro.

De su lado, TMB ha dicho que no ofrecerá más mejoras a los trabajadores del metro y ha decidido dejar de pagar un extra de 32 euros mensuales en la plantilla, ya que se trata de un importe que se le "adelantaba" a cargo de los incrementos salariales que contemplaría un futuro convenio colectivo para "crear un clima favorable al diálogo".