La empresa encargada de la limpieza y la recogida de basuras en Barcelona, Fomento de Construcciones y Contratas (FCC), habría hinchado los daños de la huelgas de 14 de noviembre de 2012 para cobrar más por sus servicios al Ayuntamiento de la capital catalana. Según ha publicado el periódico El País, la compañía de Carlos Slim y las hermanas Koplowich habría manipulado el número de contenedores quemados un 53,2% para aumentar sus ingresos en 24.000 euros.

Para entender el presunto fraude hay que remontarse a la huelga del 14 de noviembre de 2012, que tuvo lugar en varias ciudades de múltiples países europeos, como Francia, Italia y Portugal. La huelga general europea, como también se la recuerda, fue motivada por la crisis económico-financiera de 2008 y en España llevó el lema "Nos dejan sin futuro. Hay culpables. Hay soluciones". En Barcelona, la manifestación acabó con graves altercados y múltiples daños en el mobiliario urbano.

"Lo incrementaremos en 25 unidades más ficticias"

Los trabajadores de FCC estuvieron trabajaron largo y tendido hasta las tres de la madrugada, producto del importante número de desperfectos. A las 3:03 h, un ingeniero de la compañía envió un e-mail a sus compañeros en el que les aseguraba que el balance de contenedores quemados era de 47. Acto seguido, añadía que ese dato era "exclusivamente interno" y que se le comunicaría al gobierno del entonces alcalde, Xavier Trias, una cifra superior: "Incrementaremos el número de contenedores [quemados] en 25 unidades más ficticias".

En el correo electrónico también se adjuntaban dos documentos Excel: uno, que incluía una tabla con el número de contenedores quemados reales; otro, con el balance hinchado. Con todo, teniendo en cuenta el coste unitario de los contenedores, pasó de 48.183,13 a 72.305,65 euros. Antes de terminar, el remitente avisa a los responsables de tramitar la factura al Ayuntamiento de lo siguiente: "No os equivoquéis de archivo si durante la mañana tenéis que dar información actualizada”. “¡OJO!, el archivo para dar al Ayuntamiento es el que NO pone FCC”, concluye.

No es la primera vez

El Ayuntamiento de Barcelona hizo público el pasado mes de abril que FCC habría defraudado presuntamente 3,3 millones de euros por incumplimiento del contrato de limpieza y recogida de residuos de la ciudad. El gobierno municipal, ahora liderado por BComú, empezó a investigar las irregularidades una vez entró en el consistorio. Ahora se exige a la empresa que se devuelvan los 3,3 millones de euros al Ayuntamiento.

El modus operandi de FCC en la defraudación de los 3,3 millones por servicios al Ayuntamiento es muy similar al incremento falso de contenedores en la jornada del 14-N. En el caso de la presunta estafa millonaria, se estaría hablando de 6.130 servicios no prestados al Ayuntamiento entre septiembre de 2013 y diciembre de 2015. FCC llegó a manipular también la recogida de plásticos y de residuos voluminosos para conseguir beneficios económicos.