Los principales grupos de la oposición en Barcelona han exigido a Colau que fuerce la dimisión de la concejala de Movilidad y presidenta de TMB, Mercedes Vidal. Así lo han expresado esta tarde Joaquim Forn (PDeCAT), Carina Mejías (Cs) y Alberto Fernández Díaz (PP), que se han sumado a la petición expresada ayer por el presidente de ERC en Barcelona, Alfred Bosch.
De esta forma, la alcaldesa barcelonesa, Ada Colau, se ha quedado sola con el apoyo del PSC, su socio de gobierno, ante la gestión de la huelga de Metro. Con la jornada de hoy, ya van diez lunes consecutivos con parones en hora punta, una alteración que —con la tendencia presentada hasta hoy— podría implicar un coste económico de un millón de euros.
Objetivo: reprobar a Vidal
El grupo Demòcrata (PDeCAT-Unió) ha anunciado la presentación de una moción de urgencia para reprobar Mercedes Vidal. El objetivo es constatar las dificultades del gobierno de Colau para solucionar la huelga, además de denunciar su desconfianza con el equipo negociador del convenio. La denuncia no solo va dirigida únicamente a Vidal, sino también a Colau: "Ha habido un encubrimiento de la alcaldesa, que protege los que negocian de forma nefasta", han sentenciado.
En la misma línea, las críticas de Ciudadanos también han ido dirigidas a la alcaldesa. La líder del partido naranja en el consistorio barcelonés, Carina Mejías, ha pedido que asuma responsabilidades para solucionar los problemas de los barceloneses, como la huelga de Metro, en vez de aparecer "sólo en actos de partido y de proyección personal". Desde Cs, lamentan que se hayan alcanzado las diez jornadas de huelga y se exige —también— que Vidal cese de su cargo para dar paso "a una persona de más capacidad".
Por su parte, Alberto Fernández (PP) se ha dirigido directamente a Vidal y le ha exigido que solucione "ella misma" el final de la huelga. A su tiempo, el dirigente popular ha pedido más implicación del Govern en la cuestión, ya que el alcance de la huelga sale de los límites de Barcelona.
Ayer, el líder de ERC en Barcelona, Alfred Bosch, pidió ayer la dimisión Vidal por la gestión de la huelga. El republicano habló de "ineficiencia e incapacidad" para referirse al papel de Vidal al frente de TMB. "TMB, y su presidenta, deben asumir responsabilidades ante el bloqueo que han generado y que hay que resolver inmediatamente", apuntó Bosch. Mañana, el republicano coincidirá con Mercedes Vidal en la reunión del consejo de administración de TMB, donde Bosch asistirá en calidad de vicepresidente del Área Metropolitana de Barcelona.
Vidal se defiende
Mercedes Vidal ha asegurado esta mañana, en declaraciones a TV3, que no dimitirá de los cargos de presidenta de Transports Metropolitans de Barcelona y concejala de Movilidad del Ayuntamiento. "Quiero seguir trabajando para resolver este conflicto", ha explicado Vidal. Referente a ello, la principal responsable del metro barcelonés ha apuntado que la larga duración de las huelgas responde a la negativa de los trabajadores a negociar, y no a los errores de gestión del Ayuntamiento de Barcelona.
La presidenta de TMB ha asegurado que los trabajadores del Metro "ya tienen muy buenas condiciones de trabajo" y que, en las circunstancias actuales, no se puede modificar la situación actual en materia de contrataciones y salarios. Vidal ha insistido en la existencia de una legislación estatal que impide aumentar el gasto en la contratación pública. "Hemos llegado al máximo de contratación que podíamos ofrecer", ha sentenciado.