La polémica sobre el racismo ha vuelto al foco mediático, esta vez, en Japón. La ganadora del certamen de Miss Japón es Priyanka Yoshikawa, de madre natural del país, pero de padre indio, y eso ha provocado las críticas de una parte de la población.

No es la primera vez que una chica 'hafu' -tal y como en Japón se llama a los mestizos- gana este certamen. Ya pasó el año pasado, con Ariana Miyamoto, todo un hecho histórico en este país asiático. Aún así, parece que los japoneses no han aprendido la lección, y se han vuelto a suceder las críticas.

La nueva miss Japón, Yoshikawa, se ha defendido de los ataques, sobre los que ha matizado que ya estaba acostumbrada, para advertir que "el número de personas mestizas sólo aumentará, así que la gente lo tiene que aceptar". En este sentido, espera que su premio pueda ayudar a cambiar las percepciones.

Yoshikawa nació en Tokio, pero pasó años lejos de su país, para vivir en los Estados Unidos y en la tierra de su padre, la India. Cuando volvió a Japón la miraban como a un "germen", afirma. A pesar de haberlo pasado mal por ser 'hafu', afirma que esto "me ha hecho más fuerte" y que se siente orgullosa de que su padre sea indio.