Carmen Martínez-Bordiú, la nieta más conocida de Franco, está viviendo su peor momento. ¿La razón? Ha pasado de tener casa y novio a quedarse sin nada en pocos meses.

La también conocida como la nietísima mantenía una relación con el empresario Luis Miguel Rodríguez, el propietario de Desguaces La Torre, popularmente conocido como El Chatarrero.

Aunque la pareja había roto hacía meses, Martínez-Bordiú seguía residiendo en el inmueble donde habían vivido juntos. Todavía lo sigue pagando el empresario, y ahora ha decidido cortar el grifo.

El precio de alquiler no es modesto: 5.000 euros mensuales, además de los gastos del personal que trabaja para la nieta de Franco. En total, El Chatarrero ha invertido 250.000 euros en el tiempo en el que ha alquilado el inmueble.

Martínez-Bordiú tiene ahora un mes de margen para dejar el piso, pero esto no le ha llegado por sorpresa. Según publica Corazón TVE, la nietísima ya habría encontrado una nueva casa donde vivir. Mucho más modesta que los 600 metros cuadrados de la que compartía con el empresario, pero en el mismo barrio. Ambas en una zona acomodada de Madrid:

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La relación entre los dos empezó en 2013, después de que Martínez-Bordiú rompiera con su tercer marido, José Campos, para juntarse con Luis Miguel Rodríguez. Entonces se dijo que el patrimonio de este era ni más ni menos que de 40 millones de euros, un nivel económico que habría decaído mucho tras la separación con su exmujer.